viernes, marzo 17, 2006

LO PEDIS, LO TENES!!!!!!!!!!!!!!!!


LA COCINA DEL SOLTERO/A

No solo hay que ponerse bién fisicamente.

Encontrarse la heladera medio vacía o alimentarse a base de precocinados, son algunos de los males que sufren las personas que viven solas.
Sin embargo, planificando los menús y la alacena se puede llegar a un equilibrio perfecto.

Cocinar para uno puede ser tan desalentador como cocinar para una familia numerosa, o incluso más.

Hay que comprar en cantidades pequeñas, cocinar raciones ridículas y en muchas ocasiones tirar a la basura.
Para superar esta situación es necesario planificar los menús. Esta operación comienza en el propio supermercado. Hay que huir, ante todo de las ofertas y de los tamaños familiares o de los paquetes que incrementan su tamaño por el mismo precio.
¿De qué sirve comprar más barato si luego hay que tirarlo?. Es mejor pagar un poco más por cantidades más pequeñas pero disfrutar de ellas y además variar más los platos.

La lista de Compras

Bebidas. Las botellas deben ser individuales o mejor aún en lata. Un brick de jugo que se quede abierto en la heladera durante tres o cuatro días es inservible.

Conservas. Latas de atún, berberechos, anchoas , sardinas, siempre los tamaños más pequeños. Nada de abrir una lata y meterla en la heladera. Al cabo de cinco días estas conservas acabarán en la basura.

Leche. Irá en función de la cantidad que se tome al día. Pero, si no se toma mucha es mejor optar por los envases de medio litro o los bricks individuales que justo contienen la medida de un vaso. Además estos poseen la ventaja añadida de poder llevarlos al lugar de trabajo, para los días que no da tiempo a desayunar. Otra opción es la leche en polvo, solo se necesita un vaso , una cucharita, agua y listo la leche.

Platos para microondas. Normalmente los cocinados preparados para estos hornos suelen incluir sólo una ración. En ocasiones pueden resultan una buena solución, aunque tampoco conviene abusar.

Verduras. No hay que olvidarse de las que vienen congeladas, ya que se puede comprar la ración que más nos guste. Comprando un kilo de verduras congeladas se varía entre tres o cuatro tipos. De este modo quedan cubiertas gran cantidad de vitaminas.
Si se prefiere comprarla fresca es mejor optar por las bandejas de pequeño tamaño que suele haber en los supermercados .

Fruta fresca. Lo mejor es comprar la fruta por unidades. Dos manzanas, dos naranjas o una pera. Siempre lo que se crea que se vaya a consumir.


La alacena
Saber comprar es fundamental, pero también lo es tener una alacena bien organizada, ahorra tiempo y mejora la calidad de la alimentación.

Alimentos integrales. La alacena está pensada para almacenar productos por un determinado periodo. Por ello, en la medida que sea posible, es preferible escoger alimentos integrales que son los que menos nutrientes pierden con el paso del tiempo.

Almacenar en proporción. No hay que olvidar que la alacena, y sobre todo la de quien vive solo debe tener de todo, pero en la proporción adecuada. No se trata de hacer acopio de productos de capricho. Lo más importante es seleccionar en función de las necesidades, tanto de consumo como nutricionales.

Buena planificación. Puede ser de gran ayuda saber los alimentos que se van a consumir. Cocinar para varios día y congelar los alimentos, permite mantener una dieta sana y equilibrada. Para ello, se puede hacer uso de los sistemas de envasado al vacío con los que los alimentos conservan todas sus propiedades durante más tiempo.

Organización

Sobre todo, resulta muy importante tenerla bien ordenada. Todos los productos deben mostrar en lugar bien visible la fecha de vencimiento.
Si, por cualquier motivo, se han duplicado o triplicado alimentos del mismo tipo, se han de colocar detrás los que vencen más tarde. Asimismo, cuando se hace una nueva compra, los productos nuevos deben incorporarse detrás de los que ya había, así se facilita una renovación constante.

Cocinar un plato y utilizar los restos para otro. No se trata de comer los restos simplemente, se trata de elaborar otro plato pero contando siempre con el ingrediente “resto”. Por ejemplo, si se ha preparado un arroz para tomarlo a la cubana, al día siguiente con el sobrante se prepara una ensalada fría de arroz, a la que se puede añadir un tomate, una lata de atún, o un poco de jamón. Se acuerdan del famoso "salpicón"

Congelar el pan. Si un día sobra pan, mejor congelarlo. Llegarán los días que se salga tarde del trabajo y no se pueda comprar. También se puede congelar una barra entera en rebanadas que se descongelan rápidamente y así se consumen justo las necesarias.

Tener recipientes de congelación para una ración. De esta forma, lo que se guarda en la nevera o congela es cantidad suficiente para uno. Cuándo se consuma no habrá riesgo de excedencias.

Comprar lo imprescindible. Se debe procurar no acumular alimentos. Sobre todo aquellos que no son imprescindibles o de capricho. Es importante tener una alacena, pero no hay que olvidar que ésta debe facilitarnos la alimentación, no ser una caja de sorpresas.

Adaptar la despensa al ritmo del consumo. Dicho de otra forma, almacenar lo que se come y comer lo que se almacena. Se trata de rotar los alimentos. Si hay una excesiva cantidad esto no resulta; o se estropea la comida o se come a disgusto.

La visita a los familiares: llevar siempre un tupper y volver con porciones de lo que se comió. Quién nos va a negar una porción para que tengamos en la semana??

Bueno amiguitos espero que les sirvan estos consejos.

Les dejo una receta "muy fácil" y muy "lounge" para quedar muy bién y además sin carne como lo pidió el señor K.

Tarta de verduras y ricota

van a necesitar una tartera alta, aceitada

una tapa para pascualina ( guardar en el freezer la otra)
a mi me gustan de hojaldre!!
Lo que lleva el relleno
berenjenas 2
tomates 4
zucchini 3
dientes de ajo 3
cebollas 2
aceite de oliva 1 CUCHARADA
sal gruesa y pimienta A GUSTO
orégano fresco picado 1 CUCHARADA
ricota 150 GRAMOS

Cómo se hace

*Cortar los vegetales en rodajas o láminas: berenjenas, tomates, zucchini, ajos y cebollas.
Rociarlos con el aceite, sal gruesa y pimienta recién molida.
Cocinarlos en horno moderado fuerte (180ø) media hora o hasta que los vegetales estén dorados y tiernos.
Dejarlos enfriar.


*Colocar los vegetales dentro de la tartera, cerrar los costados formando un repulgo.
Distribuir por encima la ricota desgranada y cocinar en el horno unos 15 minutos, hasta que la masa esté dorada.
Retirar.




















Esta receta la saque del Suplemento "ollas y sartenes" que dirije la Señora Dora Videla , del diario Clarín.

Aprovecho esta ocasión para mandarle un gran saludo.

Nos vemos amiguitos y gracias a todos ustedes por hacer tan "agradable" esta comunicación.

No hay comentarios.: